El ejercicio de poner por escrito múltilpes metas anuales ha sido utilísimo. Sin embargo, es sólo eso, un ejercicio. En realidad no podría poner en práctica tantas metas en un año (alcanzan como para trabajar una por semana). Me propongo regresar regularmente a revisarlas para orientarme.
.
Sin embargo, si estoy seguro que el 2009 va a significar para mí avance en metas relacionales y financieras. Específicamente. Este año se consolidó mi vida de ejercicio físico y hábitos alimenticios, y es hora de que Dios me mueva a algo distinto.
.
Estoy convencido de principios y valores que guiarán mi vida en el próximo año: validación paterna, intencionalidad, entrega de cuentas, discipulado, creatividad, influencia, familia, servicio, aseguramiento del futuro.
.
Y empiezo a sentir que para formar un pacto personal con Dios en 2009, una de mis contribuciones principales es de asistencia esforzada e intencional a la iglesia, y la otra, la rendición de cuentas intensa a mis compañeros de responsabilidad. Espero poner por escrito este pacto pronto, revelado por el Espíritu Santo en mi lectura bíblica y en momentos personales con Dios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario